Generacion J

B''H

Mercado colombiano pequeño pero dinámico
“Bogotá ha sido muy abierta al kosher”

Generación J entrevistó vía e-mail al Rabino Moshé Yerushalmi, director del Departamento de Kashrut del Vaad HaRabanim HaOrtodoxim, que agrupa las dos comunidades judías mas grandes en Bogotá. Llegó a Colombia hace diecinueve años donde analiza que paso de 40 a 430 familias que hoy existen que consumen productos kasher solo en Bogotá. Destacó sus acciones y asesoramiento en beneficio del Kasher.

V.K.: ¿Cómo empezaste (experiencia) en el mercado kosher?
R.M.Y.: ”Antes de llegar a Colombia, proveniente de Israel, me propuse intentar, en cuanto llegara a Bogotá, facilitar el cumplimiento básico de las leyes de Kashrut, esto es: carne kosher Halak Beit Yosef (la categoría mas exigente en shejita y bediká); quesos, algunos Jalav Israel, pan y otros productos necesarios para mantener una cocina kasher muy incipiente. Pero con la idea de estimular, sobre todo a las parejas jóvenes, a comprometerse en la observancia de la Kashrut. Esto se desarrolló, gracias a Di´s, de manera relativamente fácil, debido a que contamos con comunitarios, de todas las edades, muy receptivos; con rabinos comunitarios con fuertes vínculos y extraordinarias relaciones con la gente y con empresas colombianas productoras de alimentos que nos abrieron sus puertas y nos permitieron asesorarlas para incluir, entre sus productos, líneas 100% kosher”.

V.K.: ¿Cuál son los rubros en particular que se dedican en Colombia?
R.M.Y.: “Hoy día, nuestras dos comunidades mas grandes en Bogotá, conformaron el Departamento de Kashrut del Vaad HaRabanim HaOrtodoxim, del cual soy su director, que lleva funcionando casi ocho años, implemento unas políticas de crecimiento en dos frentes: En primer lugar, con miras a incrementar el portafolio de productos kosher en beneficio de toda la población judía de Colombia, tenemos un plan de trabajo que consiste en ofrecer a las principales productoras colombianas de alimentos un proyecto, mediante el cual en forma absolutamente gratuita, les asesoramos para que migren a insumos, prácticas de manufactura, métodos e implementos kosher, para generar en la medida de lo posible, toda su producción con certificación kosher. La única condición que exigimos es que mantengan toda la información abierta, que tengamos una comunicación fluída y permanente y que yo como director y mi grupo de Mashguijim tengamos la posibilidad de permanecer todo el tiempo que queramos, dentro se sus instalaciones. En segundo lugar, hemos promovido un plan, mediante el cual, asesoramos a empresas que deseen exportar sus productos con certificación y calidad kosher hacia los mercados internacionales, en este caso, nuestras Comunidades reciben una contraprestación económica, que sirve para el pago de Mashguijim. Los rubros principales de exportación son: café Instantáneo, en grano tostado, edulcorantes a base de caña de azúcar, esencias saborizantes, pasta tipo Italiano, quesos, leche, petroquímicos, chocolatería, aceites y grasas vegetales, y una larga lista de etc”.

V.K.: ¿Cómo define al mercado kosher en Colombia?
R.M.Y.: El mercado kosher colombiano es muy pequeño, incipiente; pero, con todo, muy dinámico. Aspiramos a crear mayor compromiso entre todos los involucrados. Cuando llegué a Bogotá, se hablaba de apenas unas cuarenta familias que consumían carne kasher; ahora, diecinueve años mas tarde, existen cuatrocientas treinta familias que consumen productos kasher, sólo en Bogotá, y otras muchas más, en el interior del país. Además, hay un grueso número de musulmanes que compran algunos productos kosher.

V.K.: ¿Cuando se habla de lo caro que es el kosher, qué piensas al respecto?
R.M.Y.: Precisamente para evitar sobrecostos en los productos que ofrecemos y para evitar que nuestra gente pague más caro, es que hemos decidido, el Departamento y las Comunidades, abstenernos de cobrar por nuestros servicios. Las Comunidades corren con los gastos representados en salarios para nuestro personal. En Colombia únicamente los productos importados son los que tienen un sobrecosto. En cuanto a la carne kosher, el incremento promedio con respecto al mismo producto no kosher, es del 17% en promedio.

V.K.: ¿Qué resta aún por mejorar en el Kashrut de Colombia?
R.M.Y.: Creo que aún falta muchísimo por hacer, mucho por mejorar en todos los frentes, pero por sobre todo, en el de atraer a aquellos comunitarios que todavía no son clientes asiduos o no observan regularmente las leyes de kashrut.

V.K.: ¿Qué recomendaciones le darías a quienes dan sus primeros pasos en el kosher?
R.M.Y.: En relación a las personas que recién comienzan a observar el precepto de la alimentación kosher les diría que los felicito, que han escogido una manera correcta de vivenciar su judaísmo, han escogido un camino que, en general, les reportará un enorme beneficio en ambos planos: físico y espiritual. En el plano físico, no sólo en el aspecto de la salud, hoy en día las más importantes agencias de Kashrut obligan a las compañías de alimentos abstenerse de usar colorantes, saborizantes o agentes químicos que puedan poner en riesgo o comprometer la buena salud del cliente o consumidor; además, quien cuida alimentarse en base a una dieta kosher, correrá menos riesgos de interactuar con un medio no propicio (a buen entendedor, pocas palabras). En el plano espiritual, lo podríamos sintetizar, parafraseando las palabras atribuidas a Hipócrates, el padre de la Medicina moderna, pero que en realidad se encuentran consignadas en el mismo Talmud: “El hombre es el producto de lo que come; y come, el producto de lo que piensa”.

V.K.: ¿Cómo es la comunidad judía referente al kashrut? ¿es abierta o cerrada?
R.M.Y.: La Comunidad judía colombiana y la bogotana, en particular, ha sido muy abierta al tema kosher. Por supuesto que hay individuos que no se identifican del todo con las premisas del Kashrut. Sin embargo no existe evento, comunitario o particular, que no esté supervisado directamente por nuestro Departamento, con los mejores estancares de calidad y con la mejor supervisión kosher GRATUITA para todos los comunitarios.

V.K.: ¿Que le agregarías a estas preguntas para que Colombia mejore su kashrut?
R.M.Y.: Nada. Absolutamente nada. Sólo agradecer esta oportunidad para intercambiar ideas, que espero, con la ayuda de Di´s, redunde en un mejor esclarecimiento del tema kosher a nivel de su tan selecto número de lectores”.

(*) Para mayor información ingresar a www.koshercolombia.org, que contiene un blog para temas de kashrut y judaísmo.


Otras páginas de Latinoamérica:
www.kosher.com.mx Comunidad Maguen David
www.bdk.com.br - Beit Din Kashrut – Rab Shmuel Havlin (Río de Janeiro – Brasil)
http://www.aiv.org/kasher.asp Venezuela

Otro opinión desde Bogota
También dialogamos con Rosita Dargoltz, ex encargada de kashrut de un gran mercado de Bogotá, quien explicó que “el mercado kosher se creó por la necesidad de tener un lugar donde se centralizara toda la comida, la idea nació de los rabinos comunitarios y la ayuda de las familias que cuidaban el kashrut en Bogotá”.
Rubros: “Inicialmente el mayor rubro fue la carne hoy en día hay muchos productos nacionales certificados y cada día se certifican y se producen mas”.
Definición: “Cada día el mercado kosher se vuelve mas fuerte y crece a grandes pasos”.
Lo caro del kosher: “Debe ser mas costoso pues lleva muchos mas procesos que el sacrificio normal, pero da las garantías que hacen que la inversión sea en salud”.
¿Qué resta por mejorar?: “En Colombia lo que se necesita en cuanto al kashrut es una mayor producción nacional o importación de productos”.
Recomendación a principiantes: “La mejor recomendación es que sigan firmes en su propósito, y que lo hagan paso a paso”.

Enero-Marzo 2007

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