Rabino Dr Szlajen,
En referencia a su artículo sobre el "Terrorismo y la Defensa del uso de la Fuerza", (edicion 534), me veo obligada a escribirle aunque no es mi costumbre, para agradecerle y felicitarlo de todo corazón por tan preciso como objetivo análisis del tema.
Por un lado y en calidad de co-directora del GF para estudios judaicos en Londres, hasta ahora nunca había leído tan específica y multidiscipinaria argumentación mostrando cómo los principales intelectuales, líderes religiosos y países del mundo hoy nuevamente hacen oídos sordos y son ciegos respecto ya no sólo de lo que acontece en Israel sino de lo que les sucede a ellos mismos en relación al terrorismo. Y así, como hace poco más de 60 años, muestran su miedo, su arraigado y profundo antisemitismo, así como su tozudez frente a un fenómeno internacional que también les afecta. Aquí en Londres, como usted bien indica, se ha suprimido del curriculum escolar el tema de la Shoa y no por haber decidido retirar el tópico de los genocidios, sino sólo el de la Shoa, ya que el genocidio turco así como otros se siguen enseñando. Pero, salvo nosotros los judíos, nadie presentó quejas por miedo.
Por otro lado y en calidad de académica, mi más profundo reconocimiento hacia usted por el quirúrgico análisis con el que describe y fundamenta, haciendo que no haya excusas para no involucrarse en el tema y por sobre todo, ofreciendo pautas claras y concretas sobre cómo otros han hecho, hacen y harán lo mismo que Medinat Israel para su autodefensa, e incluso con consecuencias más devastadoras. Y por eso, la hipocresía de todos ellos al sancionar a Israel por defenderse y no a los grupos y estados terroristas por atacarlo. Aquí nadie marchó frente a la embajada de Siria por sus recientes y aberrantes crímenes, diciendo que era un problema cultural interno.
Sin querer extenderme más, y dado que conozco su bajo perfil en estos respectos, tal como le he dicho personalmente hace un año cuando vino a disertar sobre su investigación en bioética aquí en Londres, considero realmente un privilegio haberlo conocido en dicha oportunidad, y un orgullo y fuente tanto intelectual como inspirativa poder seguir su obra y lo útil que ella representa.
Muchas gracias por su inteligencia y valentía, así como mis más cálidas felicitaciones a Comunidades, del cual soy asidua lectora, por brindarle ese espacio y brindarme éste para escribirle y hacer público mi reconocimiento.
Dra. Chana C. Midvach
Londres, UK
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