"La vida y la muerte están en manos de la lengua" ( Rey Salomón - Proverbios 18:21)
Sábado 22 hs. Estoy en mi hogar sin haber salido ni programado una actividad y decido prender la TV para ver que hay de interesante. En los canales pertenecientes a la TV abierta, veo que en uno de ellos hay un programa archivo que durante sus dos horas se dedica sistemáticamente a reírse irónicamente de otras personas. Mientras que en otro canal se repite dicho formato buscando atacar a las personas que no comulgan con la línea política o editorial que avala la producción de dicho programa. Cansado de tanto humor agresivo, busco el canal de mayor rating con la esperanza de distraerme de tanta burla para finalmente llevarme la decepción de musicales plagados de escándalos en los cuales las intimidades sexuales y los chismes de pésimo gusto son ventilados alegremente al aire, para generar una “atmósfera íntima” que despierte el interés del consumidor.
¿Qué es el Lashon Harah?
Los sabios de la Torá explican que nuestras palabras son como flechas y como carbones que arden lentamente, pues el hombre está de pie en un lugar y sus palabras pueden arruinar y causar estragos a otra vida, a muchos kilómetros de distancia. En el Talmud se explica que el habla es la herramienta de la creación con la cual tenemos el poder de construir individuos y el mundo. Esto implica que podemos elogiar, nutrir y contener a otras personas con la palabra. También se demuestra que nuestra habla puede ser utilizada para destruir a través de palabras toxicas cargadas de desprecio, descalificaciones, ironía y agresiones. Esta clase de habla es aquella que va minando nuestra autoestima y contribuye a hacernos sentir miserables, solitarios e infelices. ¿Quién no recuerda algún suceso desafortunado familiar, social o escolar, en el que hemos recibido una palabra que nos generó dolor y angustia? ¿O cuando hemos sido nosotros quienes infligimos perjuicio a través de una expresión agresiva? ¿Y aquella vez que hemos escuchado a otras personas hablar mal de alguien que apreciábamos pero no dijimos nada? ¿Qué efectos te ha generado ello? ¿Sos conciente de los efectos que tiene esta habla dañina para tu vida?
Lucrar con el Lashon Hara
El Talmud (Arajin 15b), explica que el habla negativa es incluso peor que la espada - puesto que mata a muchas personas, incluso desde una gran distancia. Lamentablemente prender la TV abierta es una oportunidad de exponernos a los efectos nocivos y tremendamente perjudiciales del chisme grosero, la mala educación y el pésimo gusto, todos ellos pertenecientes a la esfera del lashon hara. Quizás no seas conciente pero los efectos psicológicos y energéticos son visibles y pueden corroer tu mente. No pretendo alertar ni constituirme en un predicador de algo; si comentar, desde una posición profesional de la salud mental, que existen ciertos programas de TV como los referidos a chimentos, programas de archivos o el de mayor rating como ShowMatch que viven y lucran con el lashon hara, traducido en chismes, ataques irónicos, sobre exposiciones sexuales sin pudor y criticas descalificatorias. En los últimos años, la TV argentina, otrora fecunda en creatividad, ha quedado reducida a contener programas que en su mayoría se dedican a reírse agresivamente de otros, a promover políticas del gobierno de turno o exhibir sin pudor cualquier intimidad sexual. Lo que antes era un nicho demarcado, pasó a teñir el contenido de la grilla de la TV con sus efectos indeseables. Lucrar con el lashon hara se transformó en uno de los recursos preferidos de los productores argentinos.
¿Qué efectos genera la exposición sin filtro al Lashon Hara mediático?
Argentina es un país que en los exámenes actuales internacionales de calidad educativa (PISA), ha quedado muy rezagado. Por otra parte, se nos señala como un país con altos índices de violencia escolar (peleas, ataques a maestros, prejuicios raciales entre compañeros). Si bien existen diversos factores que inciden en estos fenómenos de larga data, no podemos dejar de soslayar el factor mediático así como también el grado de comunicación cuasi infantil que se evidencia entre quienes hemos elegido para que nos gobiernen. Hoy en día constituye un hecho diario escuchar un funcionario oficial descalificar a un grupo, persona o institución que no concuerda con las políticas actuales. El dialogo adulto y maduro institucional brilla por su ausencia. Por otra parte los casos de corrupción abundan las páginas de los diarios. Todo ello genera efectos nocivos y tremendamente perjudiciales en la psiquis colectiva, entre ellos un aumento de los sentimientos de indignación, enojo, propensión a la violencia, estrés y angustia. En el peor de los casos se puede recurrir a la negación de la realidad, con lo cual nos predisponemos a generar síntomas de diversos tipos (salud, conflictos, etc.).
¿Qué hacer frente al Lashon hara mediático?
Puede sonar simplista pero comenzar a reducir el consumo de aquellos programas de la TV abierta que lucran con la descalificación y el humor grosero es un buen inicio. Por otra parte no basta con disminuir lo que puede dañarnos sino aumentar aquello que nos nutra y potencie como personas. Un buen libro, una película interesante, una charla con amigos o familiares, jugar con otras personas, hacer el amor con nuestra pareja, practicar un deporte o un programa divertido y educativo son algunos ejemplos prácticos para cultivar un espacio de cultura, amor y bienestar dentro de nuestro ser. Solo es cuestión de preguntarnos ¿Qué opciones pueden ayudarnos a sentirnos vitales, felices y plenos? ¿Qué programas de TV pueden afectar negativamente nuestra salud mental y la de los seres que amamos? ¿Qué actividades puedo brindar a mi persona y la de quienes viven conmigo para que desarrollen sus potencialidades? Puede que sea un esfuerzo, pero vale la pena. Filtrar el lashon hará tiene sus enormes beneficios.
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