Las revueltas que sacuden a gran parte del mundo árabe e islámico se van consolidando en sus diversos formatos y con distinta suerte. En algunos lugares hay nuevos regímenes con rumbos inciertos; en otros hay reclamos en marcha; en Libia represión violenta, guerra civil y genocidio .
Pareciera que la nueva era que comenzó a principios de enero en Tunez y se extendió con rapidez por Egipto, Marruecos, Libia, Bahreim, Yemen y Jordania no ha tenido efectos positivos para sacudir al regimen más peligroso de la región : la república islámica de Irán. La nueva era en desarrollo no sacudirá en esencia al regimen teocrático iraní mientras la esperanza de un cambio este basada solo en protestas esporádicas de unos cuantos miles de activistas opositores, muy pocos sobre un total de 77.000.000 de habitantes. Por otro lado, el sistema represivo iraní es más "exitoso " al no ejercer una represión masiva sino direccionar la misma sobre los organizadores. Por otro lado Ahmadinejhad no es el regimen sino el ejecutor de sus políticas. Ahmadinejhad no se sostiene por su propio peso sino porque hay un regimen que controla un parlamento, una justicia servil al poder y fuerzas armadas leales al espiritu revolucionario islámico de 1979. Es más, aún en sus contradicciones, el regimen iraní ha tenido- a diferencia de sociedades árabes- un rol inclusivo de la mujer y el estudiantado.
Aún así un cambio en el sistema de poder de los ayatollas podría darse luego de la desaparición del actual supremo, Ali Jhamenei, cuyo estado de salud se deteriora por un tumor que lo tiene postrado. En los últimos años actuó Jhamenei- el verdadero jefe de Ahmadinejhad- para que los imanes del Consejo de la Revolución, depositen el poder en su hijo.
Los sucesos del 2011 indican que podría haber un cambio de regimen en Irán en 2011 pero no por fuerza de las presiones populares . Hay que recordar que hablamos de Irán, la amenaza estratégica más gravitante sobre el estado de Israel .
La lucha por la sucesión en la conducción del país no será sencilla. La herencia espiritual del fundador de la república islámica, es parte de una discusión ideológica entre las distintas corrientes políticas y religiosas diferentes que hay en el país.
Hay un sector extremista que piensa que la revolución de 1979 se desvió a una república islámica sostenida por el voto de la gente a la mejor usanza occidental. Este es el pensamiento fanático de Ahmadinjhad que condujo al fraude electoral de junio del 2009. A contramano, los miembros de la oposición, también islámicos, piensan que hay que dar más apertura popular a un modelo político - religioso que ha llevado al país a un aislamiento vertiginoso. Los opositores no quieren una sucesión dinástica del poder real del imán Jhamenei y se oponen al modelo " libio " de conducción del país .
Sanciones económicas, amenazas de ataques militares, negociaciones interminables e improductivas para que el regimen renuncie a sus intentos de nuclearización militar; todo esto es muy interesante pero hay que prepararse para el día posterior a Jhamenei.
La falta de apoyo occidental a la oposición iraní y sus líderes ( tampoco son ninguna "metzie" diría mi madre en idish) solo dará más posibilidades para que llegue al poder el ultraconservador hijo de Jhamenei por lo que Irán redoblará los esfuerzos para que los soldados de su Guardia Republicana sean la punta de lanza para una guerra contra Israel.
La revuelta en el mundo árabe- islámico abrió las puertas a una rebelión popular contra el odioso regimen iraní. Es obligación del mundo occidental alentar y apoyar estos movimientos. Después de todo los cambios no siempre son para peor .
!Pesaj Kasher Vesameaj !.
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