El fin de la Guerra Fría, la caída de la URSS, la globalización económica, la explosión demográfica, el aumento de las migraciones, el envejecimiento de la población occidental, la expansión del Islam, la crisis económica internacional, el agotamiento de recursos y energías naturales, la contaminación y escacez del agua potable y el calentamiento global, son fenómenos que han acelerado cambios geopolíticos y geoestratégicos en el mundo que afectarán rápidamente a nuestras sociedades. Por si fuera poco el debilitamiento estadounidense y la aparición de potencias multipolares ( Brasil, China, India, Irán ) han modificado el mapa de la geopolítica y las problemáticas internacionales.
Desde el inicio de la revolución industrial ( siglo XVIII) el modelo mundial quedó signado por los llamados países occidentales. Hoy asistimos a una transformación estructural y el surgimiento de un sistema policéntrico y poliétnico. El desarrollo de vastas partes de Asia y el desarrollo rápido de otras regiones del mundo modificarán rápidamente las reglas de juego en un mundo injusto y asimétrico.
El sistema internacional de los próximos 25 años será descentrado existiendo múltiples polos de decisión cuestionando la supremacía del liderazgo occidental desgastado por años de colonialismo y divergencias entre Europa y EE.UU.
El policentrismo implica no solo cambios en las relaciones económicas sino un cambio radical en las relaciones políticas. Instituciones surgidas luego de la segunda guerra mundial como el Banco Mundial, FMI, ONU, G-7, G-8, G-20 deben reflejar esta nueva realidad. Urge la cooperación antes que la confrontación por los espacios. Analicemos algunas de las variables de cambio.
Crecimiento poblacional
La población del mundo no ha dejado de crecer desde los tiempos modernos pero se disparo luego de la hecatombe de la segunda guerra. A principios del siglo XIX había en el mundo menos de 1.000 millones de personas. En el 2015 habrá 7.000 millones con recursos de subsistencia mal distribuidos. Los países occidentales, hasta ahora hegemónicos,decrecen rápidamente ( Alemania, Italia, Holanda, España por citar algunos ejemplos ). Los países subdesarrollados, como la mayoría de los africanos, tienen población más joven pero en más frágiles condiciones de salubridad. Se prevee que una transición demográfica se producirá a fines del siglo XXI con una población que llegaría a 10.000 millones de habitantes. Como América del Norte y Europa no logran renovar su población autóctona, apelan cada vez más a la inmgración. En 1950 el 30 % de los seres humanos vivía en Europa, EE.UU., Canadá, Australia y Nueva Zelanda.
Esa proporción cayó al 17 % y en el 2050 será del 12 % según demografos de la ONU. Africa, que en 1950 tenía el 9 % de la población mundial, hoy tiene el 14 % y en el 2050 será el 22 %.
La población se urbaniza cada vez más y ya en el 2012 el número de habitantes urbanos superara a los rurales. De las 20 ciudades que superan los 10.000.000 de habitantes, 15 están en vías de desarrollo.
La amenaza migratoria
El movimiento migratorio es uno de los fenómenos más gravitantes de este siglo. Hoy hay cerca de 200 millones de inmigrantes mucho más que los 120 millones de 1995 y los 77 millones de 1965. Antes era un fenómeno regional, hoy es global. La migración descontrolada dispara varios problemas entre ellos la permeabilidad fronteriza y las dificultades socio-económicas que genera la incorporación de los inmigrantes. Un gran factor de movilización es la transferencia de dinero de familiares radicados, el progreso de ciertas sociedades y en especial la caída de la URSS, multiplicó las migraciones.
La multiplicación de conflictos en Medio Oriente, la irresolución de conflictos nacionales, la limpiezas étnicas, los choques interreligiosos y el agotamiento de recursos, son otros factores. Las migraciones, que muchas veces conllevan explotación, son vistas como amenazas silenciosas y se despliegan así represiónes contra los indocumentados como nuevos parias sociales. Los estados que reciben inmigrantes tienen miedo por su identidad ( Italia, España, EE..UU., Israel, Francia, Holanda) y se debaten los modelos migratorios.
Un Mundo sediento
El crecimiento demográfico, la injusticia distributiva y el cambio climático ya han afectado los niveles hidricos en un mundo en el que solo el 3 % de las aguas disponibles son dulces. Si no se logra cogestionar el uso racional de aguas habrá consecuencias sanitarias, sociales y ambientales. El mundo ya conoce 25 conflictos armados por el agua y van en aumento; especialmente en Medio Oriente ( Turquía- Siria; Israel-Siria; Israel- Palestina ; Irak- Irán ).
El 25 % de la población mundial no tiene acceso al agua potable y un 40 % no tiene una red eficiente. 500 millones de personas viven en 31 países con estrés hídrico.
Un informe de la ONU establece que en el 2050, 1800 millones de personas vivirán en regiones con casi total escacez de agua. Los europeos de hoy consumen 8 vecemás agua que sus abuelos. El derroche de agua es muy grave. 45 % de lo que se extrae se pierde por evaporación, mal uso, contaminación y filtraciones en la distribución. Al aumentar el consumo de agua aumentan las aguas residuales. El 70 % de los desechos industriales se vuelcan a los ríos y mares sin tratamientos.
La carencia de agua es una de las principales causas de las migraciones.
Las armas las carga el diablo
La proliferación de armas y la carrera armamentista es uno de los fenómenos más preocupantes. Los progresivos acuerdos de desarme de EE.UU. y la ex URSS ( hoy Rusia ) no ha conducido a un mundo con menos armas sino que estas han ido a parar a manos más peligrosas ( Irán, Siria, Corea, Venezuela ). Por otro lado la búsqueda afanosa de armamento nuclear ya de por si ha generado una carrera armamentista en Medio Oriente.
Los arsenales disminuyeron pero esa baja se compensó con menos armas pero otras más modernas,de mayor letalidad.
Los gastos militares a nivel mundial han aumentado un 52 % desde 1996 y en el 2008 llegaron a 1464 billones de dólares. Lo que EE.UU. gasta en armas se equipara al total acumulado de lo que gastan los 23 países que lo siguen. Rusia y China son otros fenómenos gastadores .
Un dato : entre 1992 y 2006 se vendieron más de 2.800 aviones de combate. 8 países fueron los que más aviones compraron : Turquía, India, China, Taiwan, Arabia Saudita, Egipto, Israel y Emiratos Arabes.
Entre 1991 a 2006 se vendieron a países en vías de desarrollo 26.000 misiles antiaéreos y 2.700 misiles antibuque. No hay cifras conocidas sobre el contrabando nuclear pero el fenómeno existió y permitió la carrera nuclear de Pakistán, Irán y Corea del Norte.
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