¿Hace falta que celebres solo en Año Nuevo? por Pablo Nachtigall


¿Hace falta que celebres solo en Año Nuevo?
Por Pablo Nachtigall


Las fiestas de fin año están con nosotros, con toda su energía, música, exclamaciones y saludos de buen año. Junto a eso, las empresas grandes, medianas o pequeñas, negocios, se encargan de hacer fiestas y brindis en conmemoración al año nuevo. Cuando vemos esto, hay implícita una idea y es la de celebrar la salida de un año viejo y la entrada de uno nuevo, quizás con mas satisfacciones y menos pálidas. En general, para estas fechas hay un aire festivo totalmente palpable en la calle: adornos, negocios abiertos de par en par, preparativos para las fiestas.

Parece que esperamos todo un año para finalmente permitirnos celebrar a pleno un par de fiestas. Como si solamente en esas fechas formales y aceptadas por todo el mundo, pudiésemos dar rienda suelta a festejar y conectarnos con la energía de la celebración. El resto del año, quizás en alguna fecha de alguna fiesta judía festiva, pero en general transitamos el año sin alegrarnos y vivir a pleno esta energía. Parece que necesitamos permisos "formales" para conmemorar o celebrar.


¿Hace falta que celebremos solo en Año Nuevo?

Osho, un maestro iluminado de la India decía que la vida debería ser una continua celebración, un festival de luces durante todo el año. Sólo entonces la persona puede crecer, puede florecer.
Osho decía que era necesario que transformemos las cosas pequeñas en celebración.
"La vida no es una cárcel, no es un castigo. Es una recompensa y es dada sólo a aquellos que se la han ganado, a aquellos que se la merecen. Todos tenemos el derecho de disfrutar. Sería un pecado si no disfrutamos. Iríamos en contra de la existencia si no la embellecemos, si la dejamos simplemente como la encontramos". Osho también explicaba que tenemos el condicionamiento de la sociedad que solamente en las fiestas formales podemos soltarnos, festejar, estar alegre. Una creencia limitante.

De hecho desde el judaísmo, desde la Torá, se nos explica que la "alegría" es una mitzva en sí, porque quién está contento, está en estado expansivo y porta una luz, energía que lo lleva a lidiar con los desafíos cotidianos desde otra postura. La Torá enfatiza la importancia de la "simja" (alegría) como un estado del alma que todos podemos y debemos desarrollar a fin de tener una vida plena de amor, risas y placer.

Osho y Torá, dos enfoques muy distintos pero los dos nos hablan de lo mismo. No precisamos esperar a alguna propaganda idiota mostrándonos una familia contenta en actitud de festejo, para salir a celebrar ahora mismo. ¿Y qué tenemos para celebrar? Que estamos vivos, que tenemos el potencial de amar, generar proyectos, bailar sin razón alguna, festejar las pequeñas cosas sin ningún tipo de explicación. Y esto lo podemos hacer en cada momento, en el aquí -ahora presente.

Ahora mismo antes que lleguen las fiestas, podemos ir haciéndonos las siguientes preguntas: ¿Me permito celebrar el hecho que estoy vivo? ¿Me permito bailar y cantar sin razón alguna, solo porque lo deseo? ¿Me permito celebrar las pequeñas cosas cotidianas? ¿O estoy esperando como un corderito amansado todo el año, para finalmente soltarme y divertirme en año nuevo?

Te invito a que traigas más risas, placer y energía a tu vida durante todo el año. Feliz año nuevo, que sea prospero y abundante para vos en celebración y simjá sin ningún motivo!



Lic. Pablo Nachtigall - Psicólogo & Terapeuta en Bioenergética Transpersonal
http://psicoholistica.tripod.com/psicologiaholistica/

Ver otros Artículos de Nuestro Consultorio Psicológico


Planteale tus inquietudes o temas de interés a nuestro consultor psicológico,
escribiéndole a consultorio@delacole.com