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Para aquellos que quieren ir a Israel –para sentir entre sus dedos o debajo de sus pies el suelo de la Tierra Sagrada- pero para los cuales el viaje es económicamente prohibitivo o excesivamente largo, existe una alternativa: traer la tierra de Israel hacia ellos.
Por sólo 20 dólares, una compañía llamada Suelo de la Tierra Sagrada, le envía un kilo de tierra sagrada para ser usado como a Ud. más le plazca. El suelo está bendecido por un rabino; viene en un “elegante envase hermético” y su importación está aprobada por el Departamento de Agricultura de los EE.UU.
“Similar en su espíritu a la certificación del proceso casher, el suelo de la Tierra Sagrada tiene un certificado genuino del Rabino Velvel Brevda, el Director del Consejo de Gueula, en Jerusalem”, anuncia el sitio web de la compañía (holylandearth.com)
Y ¿qué se puede hacer con el suelo sagrado? Aquí viene la parte material, de acuerdo al sitio web: roturar tierras, plantar de árboles o jardines, bendecir nuevos hogares, esparcir sobre personas para la buena suerte…y sepelios.
Para alguno que quiera que su tumba se llene con más de un kilo de tierra sagrada, la compañía ofrece discutir potenciales costos con el comprador.
“Sea creativo”, recomienda la compañía; “úsela del modo que desee”.
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