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Israel logró frustrar un atentado suicida que iba a llevarse a cabo en Jerusalém.
El atentado, que iba a llevarse a cabo en Meah Shearim fue frustrado luego de que la policía y el Shin Bet recibieron información de inteligencia de que el Hamas estaba planeando llevar a cabo un atentado en la ciudad.
A raíz de la alerta la policía colocó controles en las entradas a Jerusalém y llevó a cabo una serie de medidas de seguridad en un esfuerzo para interceptar al terrorista y frustrar el plan.
Gracias a la información del servicio de inteligencia que le suministró el Shin Bet, la policía fronteriza de Jerusalém arrestó a un hombre de 38 años, de origen árabe, residente de la Ciudad Antigua, Hussam Nablusi, sospechado de estar involucrado en el planeamiento del atentado.
Durante su interrogatorio, Nabulsi, que tiene documento de identidad israelí, le contó al Shin Bet que iba a recibir una bomba de 15-20 kg y tenía que pasarla a la persona que iba a realizar el atentado, que llegaría a Jerusalém de la ciudad de Nablus.
La policía dijo que Nablusi confesó que se había sido reclutado al operativo del Hamas por su sobrino palestino, Said Tabanja, que también es de la ciudad de Nablus, una ciudad considerada como fuente importante de terroristas palestinos.
36 horas después, las fuerzas del ejército israelí que operan en Nablus, arrestaron a Tabanja.
Durante su interrogatorio, Tabanja dijo que había enrolado a su sobrino para el atentado, siguiendo ordenes del jefe del Hamas en Nablus, Said Qutab. A raíz de la nueva información, otros dos palestinos fueron arrestados en la ciudad.
Dos palestinos, residentes de Nablus, Amin Surchagi y Allah Maurauf, que estaban viviendo en el norte de Jerusalém, fueron arrestados por la policía, bajo la sospecha de estar involucrado en el planeamiento del atentado.
Durante su interrogatorio, ambos, comerciantes de frutas y vegetales, le dijeron a la policía que habían contrabandeado la bomba que iba a ser utilizada en el atentado, adentro de un carro que llevaba verduras. Ambos contaron a los interrogadores que la bomba iba a ser detonada por un terrorista suicida, pero en el caso de que el terrorista era arrestado, el dispositivo también podía ser operado a través de un teléfono celular, informó la policía.
Cuando la bomba llegó al norte de Jerusalém, los dos hombres se contactaron con Nablusi para entregársela, pero el operativo policial masivo en el área frustró sus esfuerzos. Al comprender que la entrega no iba de acuerdo al plan, los dos hombres escondieron la bomba en una de sus casas del pueblo A-Ram, que queda en el limite con Jerusalém.
Después de que una reunión con el operador principal del Hamas en Nablus no logró producir una alternativa viable, los hombres ocultaron la bomba en el barrio de Beit Hanina en Jerusalém.
Después de haber sido arrestados, los dos hombres llevaron al Shit Bet al lugar donde habían escondido la bomba, dijo la policía. Un bolso, con una bomba de 15 kg, fue hallada en el sitio, y fue detonada con éxito por expertos de la policía.
A raíz de un giro repentino en el plan, Qutab, el terrorista del Hamas que planeó el atentado, murió junto a otros dos hombres en una explosión en Nablus. La causa de la explosión aun no está clara.
El terrorista que iba a llevar a cabo el atentado aun no fue hallado.
Oficiales del servicio de seguridad estiman que hasta el 80% de todos los atentados que se planean son descubiertos y frustrados por Israel. Ha habido 115 atentados suicidas durante los últimos tres años y medio de violencia.
Luego de esta cooperación entre el Shin Bet, el ejército y la policía, los oficiales de seguridad israelíes dijeron que las organizaciones terroristas palestinas como el Hamas, están utilizando árabes residentes de Jerusalém que tienen documentos de identificación israelíes en sus atentados, dada la facilidad con la cual pueden viajar por las ciudades israelíes y volver a las zonas árabes.
Además, el hecho de que se haya completado parte de la barrera de seguridad en el norte de Israel, obliga a los grupos terroristas palestinos a actuar en la zona norte de Jerusalém, donde la construcción está en marcha.
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