Aarón Benchimol, rabino de Agudat Dodim, nos contó sobre la importancia del centenario de la institución, el impacto del viaje a Israel realizado, la identidad en formación y la continuidad en el tiempo.
- ¿Qué significan para ud. estos 100 años de Agudat Dodim?
Es un suceso más que importante festejar ,a Di-s gracias ,el centenario de una institución como esta. Ojalá muchas otras lo puedan lograr. Llevo 10 años en el rabinato y se viene realizando una tarea muy importante donde la comunidad empieza a resurgir luego de momentos difíciles. Los jóvenes reemplazan a los mayores en la conducción. Hoy queda en manos de ellos una responsabilidad enorme, con mucha unión de parte de la comisión directiva y el rabinato, y con eso se pueden lograr importantes cosas porque hay un entendimiento pleno en todas las áreas. Estamos todos unidos en una sola idea respecto a la orientación de la comunidad: lo que queremos de nuestros hijos y nietos, hacia dónde buscamos llegar, y qué se quiere hacer.Cuando el liderazgo esta pensado sin un rumbo claro ,es ir a la deriva.
¿Qué conclusiones sacaron del viaje a Israel?
Luego de un largo viaje nos fuimos directamente con las valijas en el autobús a rezar y acariciar las piedras de el kotel .Fue muy emotivo volver a sentir lo que siempre fue nuestro. Sentimos que la espiritualidad es real, muy nuestra y no cansa. Venimos como representantes de 100 años de historia y trajimos nuestras propias primicias. Sabemos que existen ciertos reparos, miedos y prejuicios en lo que tiene que ver con la espiritualidad. Pensamos si estudiar, rezar, visitar rabinos no va a llegar a saturar a los participantes. Vimos todo lo contrario. Cuando la gente iba a pedir bendiciones a los rabinos o cuando salíamos de alguna conferencia que algún rabino nos dedicaba en forma especial, veíamos que la gente salía maravillada. Nos dimos cuenta de que el común de la gente le escapa a esto por miedo, por prejuicios, y observamos que se rompieron muchísimas barreras .
¿Qué identidad formó la institución en estos 100 años?
La identidad es volver a ser quienes fuimos siempre. Seguimosel camino de los judíos que salieron de Damasco. Con judíos impregnados en las enseñanzas sagradas de rabi Jaim Vital. Antes las instituciones, con buenas intenciones, tomaban caminos distintos. No se veía el norte claro y no se podía hablar con esa coherencia y claridad; hoy sí. Antes había muchas comunidades que no nos escuchaban y hoy si. Si los judíos no nos identificamos con nuestro judaísmo a pleno, entonces vamos a estar en graves problemas porque se complicará la transmisión. En nuestra comunidad tenemos desde la persona que viene solamente en Iom Kipur hasta el joven de Yeshiva y de Kolel. ¿Cómo se hace para tener a todas las ideas dentro de un mismo marco y respetar a cada uno desde su lugar?. Lo primero que se necesita es que se entienda que no hay presiones de ninguna índole; cada uno va a tomar del judaísmo lo que realmente se vea capacitado para entender y nosotros como educadores, rabinos, o activistas comunitarios, le vamos a dar las herramientas para que crezcan desde su lugar.
¿ Qué otras actividades conmemorativas tienen planeadas?
Este es un año de festejos. Hemos hecho el viaje como algo muy importante, pero también se puso la piedra fundamental del nuevo edificio y la idea es seguir haciendo una serie de actividades. El Sefer Torah fue donado por las familias de la institución y su connotación especial es que no es monumental ni grande, sino que es uno pequeño, liviano ; que los chicos bar mitzva lo puedan alzar. Queremos darle un simbolismo hacia el futuro .Somos una comunidad de 100 años pero nos preocupamos por los jóvenes en dejarles una comunidad viva en manos de ellos con un judaísmo en crecimiento. Tenemos una fecha después de las Altas Fiestas para hacer la incorporación del Sefer , y también tenemos encargada la cobertura del mismo. Lo que en este momento estamos haciendo es visitar a las distintas familias, más allá de las que participaron y viajaron a Israel, para que los que se quieran adherir y así el Sefer Torah tiene el simbolismo que toda la comunidad lo escribió. Tenemos pensado presentar el libro de la comunidad que fue un trabajo muy importante de parte del escritor Walter Duer y la Lic. María Cherro de Azar, quienes hicieron un trabajo fenomenal al compaginar historias y documentos.
No festejaremos el pasado sino el futuro . Las condiciones están dadas para eso.En la sinagoga de Agudat Dodim conviven mayores y jóvenes. Eso queremos. Hay mucho trabajo realizado y no es solo mérito mio. Tenemos que poner todas las energias en los que vendrán y todas las actividades planeadas están inspiradas en esta idea . Eso queremos transmitir.
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