En Comunidades Nº: 535 (12/12/2012), tuve el gusto de leer el sesudo comentario que desde Ashkelon-Israel les hizo llegar el Rabino Gustavo Surazski.
En dicho texto, el rabino brindó una excelente visión del cómo se ha mentido en uno de los temas más controvertidos de la reciente gran confrontación abierta con el HAMÁS, y sus asociados en GAZA… esto es, respecto de una supuesta “asimetría en la aplicación de la fuerza” por parte de Israel…, y de cuánto y cómo desearían -los enemigos del Estado Judío- “equiparar las posibilidades” entre las partes en conflicto.
El problema para Surazski es que -por su propia investidura y muy buen tino- no pudo cerrar su comentario ahondando en el… ¿y cómo se evita la repetición de semejantes críticas, si resurgen los ataques por parte de los árabes-palestinos? … habida cuenta de, que casi todo lo que ha hecho, hace y/o haga Israel será denostado por los de siempre. Para intentar responderle tendríamos que remitirnos a muchos años atrás, cuando alguien muy sabio postuló algo estratégicamente tan simple como: “algunas pequeñas guerras pueden devenir en grandes guerras…, pero muchas pequeñas guerras evitan las grandes guerras”.
Esto, trasladado al conflicto reciente del Medio Oriente, implica que…, si tras aquel fulgurante operativo “Plomo Fundido” (2008), Israel hubiera tomado la política del “golpe por golpe”, disparando un misil por cada otro de los enviados por el HAMÁS y demás grupos terroristas instalados en la FRANJA DE GAZA (y ellos lanzaron alrededor de 8.000)…, el daño estructural y social dentro de tan pequeño territorio habría resultado tan severo -o quizás mucho peor- que el inflingido durante los muy pocos días que duró “Pilar Defensivo” (2012).
Entonces…, una estrategia rigurosa, quizás hubiera evitado la necesidad misma de “Pilar Defensivo”; y también quizás…, hubiera sido mucho más difícil de criticar, aún para los peores y más constantes difamadores de las políticas israelíes.
Bien…, queda en claro que DE TODO SE APRENDE.
Esperemos el próximo capítulo…, pues lo habrá.
Atentamente.
ALBERTO JORGE SILBERSZTEIN
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
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