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Rabia, silencio y tristeza en una ciudad bajo fuego.
SDEROT: SOBREVIVIR CADA DIA

Por Leandro Fleischer
semanas, Sderot, se volvió tristemente conocida después de que un par de miles de sus habitantes decidieron irse a otros lugares debido a la gran cantidad de cohetes Kassam que cayeron allí arrojados por terroristas palestinos desde la cercana Gaza.
Comienzo mi caminata a las 15:30 hs de un día domingo. Llego a una zona residencial. A mi izquierda hay casas y a mi derecha canchas de fútbol, básquet y tenis y, además pequeños parques con juegos para niños. Sin embargo, no veo a nadie haciendo deporte alguno; ni chicos jugando ni gente caminando por la calle. Lamentablemente, aunque está
muy suave, sólo puedo escuchar el viento. Me pregunto cuánta gente está en las casas que se encuentran a mi izquierda y cuánta se escapó. A pesar de todo, veo pasar un auto cada tanto por esta parte de la ciudad.

Llego a una calle comercial. Todo lo que había allí eran galerías, negocios de todo tipo, kioscos, restaurantes, puestos de comida rápida y hasta un pequeño shopping. Lo que observo allí no me sorprende: muy poco movimiento vehicular y de personas y la mayoría de los locales cerrados. Seguramente los dueños de estos negocios se encuentran fuera de Sderot. Algunos de ellos, pienso, están en la ciudad de carpas creada por el billonario de origen ruso Gaydamak en Tel Aviv. Sin embargo, no importa dónde ellos se encuentren, todos tienen algo en común: están lejos de sus hogares y trabajos por miedo a los misiles que lanzan a diario desde la Franja de Gaza.

Sigo mi recorrido y me acerco a una galería de comercios, de los cuáles están abiertos un 10% aproximadamente. En uno de los pocos locales que no están cerrados paro a comprar algo para comer. El lugar está lleno de bandejas y hornos, pero la comida que había hecho el dueño no llegaba ni a un cuarto para lo que estaba preparado el negocio ni para lo que solía hacer cuando había una relativa calma. Analizando esto y la expresión en el rostro del dueño del local, cualquiera podría darse cuenta de que las ventas habían disminuido vertiginosamente. De hecho, quiero intercambiar unas palabras con respecto a su situación actual, pero se niega sin dar explicaciones y vuelve a sentarse con una expresión aburrida y triste. En otro negocio contiguo paro a comprar una bebida, pero no tengo el valor de preguntarle nada a la dueña de ese local debido a la expresión de rabia en su rostro.

En la calle el silencio ya se torna molesto. En los pocos residentes que se quedaron en la ciudad se puede apreciar una mezcla de resignación, nerviosismo, rabia y tristeza. Nunca antes había vivido una experiencia similar.

Del otro lado de la calle hay un pequeño shopping. Si bien algunos locales están cerrados, la mayoría están abiertos, pero no veo ningún cliente. Ni siquiera en el supermercado gigante que hay allí, en el cual había un silencio imposible de encontrar en otra sucursal de la misma cadena en cualquier otra ciudad.

Los kassam no sólo hieren y matan a los ciudadanos, sino que también los daños económicos y psicológicos son graves. Los niños, por ejemplo, no pueden estudiar como cualquier otro debido a que las escuelas se cierran permanentemente. La gente vive con la incertidumbre de no saber qué va a pasar. Los que se fueron se preguntan cuándo podrán volver y los que se quedaron se preguntan si ellos serán las próximas víctimas, si el kassam ahora caerá sobre ellos.

Los carteles colgados en las calles expresan mejor que mil palabras las sensaciones del pueblo de Sderot y del pueblo israelí en general: "Olmert fracasó en el norte y en el sur…Los soldados reservistas junto a Sderot" o "Héroes de Sderot, estamos con ustedes" o "Operación Escudo Defensivo 2 en Gaza" (En referencia a la operación realizada por el ejército israelí en Jenín en 2002, que derivó en una calma transitoria en Israel y que fue un durísimo golpe para los terroristas palestinos en esa zona del cual todavía no se terminan de recuperar).

Ahora yo me pregunto, ¿donde están los medios que cubren los problemas que hay en Sderot? ¿Por qué el gobierno israelí no hace suficientes esfuerzos para terminar con este problema? ¿Existe otra manera de traer calma a Sderot sin necesidad de realizar una operación militar como la realizada en el 2002 en Jenin como piden los habitantes de la ciudad? Y si la hay ¿Por qué no la ponen en práctica ya?

Número 418
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