Sergio Burstein, Familiares de Victimas y Amigos del atentado contra la AMIA
Sergio Burstein se ha transformado en uno de los Familiares más emblemáticos de la agrupación que organizara el acto de repudio al fallo del Tribunal Federal 3.En esta nota repasa algunos puntos oscuros de la investigación y tiene duros conceptos para con la SIDE, los policias inculpados y hasta con Memori Activa.
Especial para Comunidades
¿Cómo se siente después del fallo en el que se absolvió a los policías y a Telleldín?
Fue una vergüenza. La sensación que tuve después de este fallo es que mis hijos, una vez que lo oyeron, hayan salido corriendo a ver a su madre en la casa porque dijeron “mi vieja está en mi casa”, y cuando fueron se dieron cuenta que la realidad era que la mamá no estaba, que la habían matado.
En algún momento, un ministro dijo que el tribunal actuó en forma valiente, para nosotros no es ninguna valentía. Valentía hubiera sido si hubiera dado los nombres que tenía que haber dado. Aunque tampoco sería valentía, simplemente el tribunal hubiera hecho lo que le corresponde a todo juez. Con el fallo culminaron diez años de vergüenza, diez años de una investigación en la que se hizo todo lo que se debe hacer para que no se sepa, con un juez que paga para obtener un testimonio que se podía obtener de otra manera, con agentes de inteligencia que no hicieron buen uso de su apelativo. Por ejemplo, un jefe más que importante del servicio de inteligencia, el señor Jaime Stiusso, tuvo la desfachatez de declarar, sin ponerse colorado, de que tuvieron las escuchas de la embajada de Irán antes del atentado a la AMIA y las desecharon, las borraron porque no tenían un traductor de farsi. Si esto es inteligencia para ellos, evidentemente no saben lo que esa palabra significa. Sí hubo cuatrocientos mil dólares para pagarle a Telleldín, pero no para pagarle un miserable sueldo a un traductor de farsi. Nadie se preocupó para que no los mataran y hoy, alegremente, vienen y lo declaran en el tribunal .
Como olvidarse, también, de las palabras del gran mentor de esta vergonzosa argentina de diez años , Menem, que dijo: “no escatimaremos esfuerzo ni presupuesto para investigar y llegar a la verdad del atentado a la AMIA”. La verdad es que está prófugo y, algún día, tendrá que llegar acá y responder por todo esto. Hoy la justicia se olvidó de mencionarlo, pero marcó el camino; lo nombró a Corach y a Anzorreguy entre otros. Pero yo creo que acá hay un triángulo, el vértice es el jefe y los demás responden a ese jefe. Menem sabía lo que estaba pasando, sino que venga y que lo declare. No se hizo nada para evitar el atentado, no se hizo nada para investigarlo y, menos aún, para que haya justicia.
Otra sensación que me queda de este fallo es que nuestros cuestionamientos para pedir las sentencias de los policías y de Telleldín no fueron respondidos por ninguno de ellos. Evidentemente el tribunal vio otra cosa. Lo que duele, además, es que ni siquiera van a ser enjuiciados por lo que las escuchas demostraron, los apremios que le hacían a comerciantes. Les comprobaron más de sesenta ilícitos de cómo apretaban a comerciantes y delincuentes para sacarles plata. Después se enojan cuando uno dice “la maldita policía”. Lo que más bronca me da es que en los programas los hacen ver como las carmelitas descalzas”, cuando son cinco delincuentes que tendrían que estar en la cárcel hace rato, son una vergüenza. Pero hay gente que les da lugar para que se vean como pobrecitos, porque las escuchas eran ilegales, perfecto, eran ilegales, ¿y lo que decían en las escuchas?
Lo que también nos duele es que, durante ocho años, las personas que dicen ser inocentes, nunca pusieron a disposición de las partes la prueba para decir “esto no es así”. Nunca respondieron a nuestros requerimientos. Es por eso que entendemos que son responsables del atentado a la AMIA.
Hay gente que dice que no hubo “conexión local”...
Quien encubre, es exactamente lo mismo que quien cometió el delito, porque por algo lo hace. Si no hay “conexión local”, ¿por qué se preocuparon mucho en encubrir, de borrar, de no investigar? “Conexión local” no es sólo la policía y Telleldín, sino todo lo que tuvo que haber acá para que esto fuera posible hacerlo, desde antes y después del atentado. Hubo muy poco interés para evitarlo y luego, una cadena de encubrimiento para taparse unos a otros porque nadie sabía a quién le iba a tocar pagar por su responsabilidad.
Los que dicen que no hubo “conexión local”, afirman que hubo encubrimiento para tapar sus negocios sucios y no porque tengan responsabilidad en el atentado...
¿No era más barato decir “tengo negocios sucios”? ¿Cuánto es la pena por negocios sucios? ¿No era mejor confesar eso que comerte ocho años por un atentado, del cual nadie te aseguraba que ibas a salir absuelto? Podés quedar preso por el resto de tu vida. Yo creo que una persona, honesta y decente, reconoce, aún, las equivocaciones. Ante un mal mayor, se acepta un mal menor. Ellos no lo hicieron, pero de todas maneras, no les fue mal porque hoy están en libertad.
¿No cree que con todos estos conflictos internos, se está dejando de lado la “pista internacional”, o sea, los autores materiales y principales responsables del atentado?
Hace tiempo que estamos pidiendo decisiones. Con Bielsa se estaba hablando de la posibilidad de un tercer país para ser juzgado. Pero tampoco debemos dejar que todo esto nos haga olvidar el objetivo fundamental que es encontrar al que, supuestamente, Telleldín dice que le dio la camioneta, donde cargaron los explosivos, quién los proveyó, quién preparó la bomba, quién les dio la logística desde aquí para que lo pudieran hacer y quién era la conexión que tenían los iraníes. Hay muchísimo por saber. Me duele mucho decir que lo hayan denominado “Teoría Oficial”.
Hay que empezar a leer los legajos desde el primer día. Muchos abogados e investigadores coinciden en que la verdad está en las primeras hojas. También tenemos que tener los famosos archivos secretos de la SIDE, pero no está. Todo lo que justifica lo que ellos dicen, está; lo que nosotros necesitamos, nunca está.
¿Cree que existen altas posibilidades de que vuelva a haber otro atentado en la Argentina?
Si un país no demuestra que cuando ocurre un hecho de esta naturaleza, cuando se vulnera la soberanía, cuando se atenta contra ciudadanos argentinos y no argentinos, cuando se ataca una sociedad tan impunemente, y digo impunemente porque no hay investigación seria, no hay justicia ni culpables. Si vos tenés que elegir un país, ¿cuál elegís?
La impunidad acá tiene monumentos, que son los canteros que se ponen delante de cada institución judía. Eso es el monumento a la impunidad. Hasta tanto esos monumentos sigan erguidos en cada lugar en que están, vamos a vivir en guetos en un país democrático, en donde aparentemente no se discrimina ni se señala a ningún ser humano por su religión o color, pero nosotros en Argentina estamos señalados. Nosotros, la comunidad judía, estamos a la vista de todos, cuando en realidad estos pilotes, tienen que estar en todos lados. Primero porque fue un ataque a la sociedad argentina y, segundo, porque la sociedad argentina entera está en peligro, no solamente las instituciones judías.
Usted fue uno de los oradores del acto de APEMIA, ¿no cree que asistieron grupos, como los piqueteros del “Polo Obrero” por ejemplo, que sólo buscaban propaganda política mas que solidarizarse para repudiar el fallo?
Nosotros tenemos muchas diferencias con APEMIA, una de ellas es esta. Nosotros no hacemos política partidista con el atentado. Sí hacemos política porque esto es política pura, pero nuestro partido es la verdad y la justicia, sin compromisos políticos con nadie; ni presidentes, ni ministros, ni organizaciones, ni entidades comunitarias. Con los únicos que tenemos compromiso es con los muertos.
Creo que la gente dio su reprobación a determinados discursos, pedían justicia y AMIA, no mezclar. Aunque no puedo decir que los que hayan hecho uso de la tribuna, no hayan tenido las mejores intenciones en sus discursos, ni que estén haciendo negocios, ni que estén utilizando el tema AMIA. Más allá de todo eso, nos duele mucho que se haga política y no lo aceptamos, pero no somos quien para prohibirlo. Diferimos con APEMIA, pero el “Polo Obrero” y todos los que estuvieron en el acto se merecen nuestro respeto, porque es un país democrático con libre expresión. De ahí en más, en consentir con su discurso o no, ya es otra cosa, eso es queda dentro de nosotros.
¿Piensa que alguna vez se van a poder unir los distintos grupos de familiares?
Yo creo que lo que puede unir son objetivos comunes. Nosotros pensábamos, ilusamente, que lo que nos podía unir era la verdad y la justicia, pero evidentemente hay muchos que no lo entienden así y en aras de llevar aguas para su molino, como pasó en el último acto, en el que salió “Memoria Activa” a decir un montón de mentiras que no pueden sostener, como por ejemplo que íbamos a salir en defensa de Galeano o que íbamos a repudiar el fallo. Al otro día no pudieron sostener estas afirmaciones, porque como quedó demostrado en el acto, no salimos a defender a Galeano ni tampoco repudiamos el fallo, es más, dijimos que a partir del fallo se legalizó la impunidad en la Argentina. Nosotros disentimos con el fallo, pero lo respetamos.
Además hubo un llamado de “Memoria Activa” a no participar del acto...
Sí, y eso me llena de vergüenza. Pero la mentira tiene patas cortas. Lograron lo que querían, no fue tanta gente como se pensaba iba a ir. Ellos embarraron la cancha, pero bueno, tendrán que dar las explicaciones correspondientes. Mi pregunta es: si no defendimos a Galeano y no repudiamos el fallo, quiero que me expliquen por qué acusaron a Telleldín, ¿en base a qué lo acusaron si ahora dicen que no era culpable?
Alguna vez, el abogado Jacoby, me preguntó descaradamente si yo podía dormir con lo que estaba haciendo. Yo no sé quién se cree que es. Sin embargo nosotros no fuimos a brindar a la noche, después de leído el alegato, con el abogado de Ribelli.
Lamento mucho que familiares de víctimas de la AMIA no hayan entendido nuestro mensaje y sí lo entendieron tantas víctimas del dolor, porque se sentían involucrados en lo mismo.
Podemos pensar distinto, pero todos buscamos lo mismo, que es el bienestar general. Si todos pensamos lo mismo, nadie me obliga a pensar igual que el otro, lo que sí me obligo es a no decir chicanas, petardear o salir con mentiras a sostener lo insostenible.
Nosotros pedimos el juicio político a Galeano e incluso pedimos que se investigue a Beraja. La gente sabe que pensamos así. Entonces, en vez de hablar tanto y de acomodarse de acuerdo como venga la ola, pongámonos juntos a trabajar, aceptemos nuestras diferencias y no nos creamos los dueños de la verdad. Que no cuenten con nosotros si van a mantener esa postura soberbia.
¿Por qué cree que el gobierno estuvo ausente en el acto?
No me gustó que no haya estado el gobierno, representado por quien sea. Habrán hecho una lectura equivocada, le habrán informado mal. Mas allá de si estuvo o no el gobierno, no me preocupa tanto. Lo que a mí me preocupa es lo que haga el gobierno. Que haga realidad lo que expresa en palabras. Llegó el momento de los hechos.
Yo confío en el presidente. Confío en que lo que dijo no es tan sólo un discurso político. Creo en su intención. Hoy hay que llevar esa intención a cabo. Tiene todo nuestro apoyo para que esto se produzca. Ojalá que el presidente esté presente con los hechos junto a los familiares, eso es lo que importa.
¿Con todos los esfuerzos que están haciendo para reclamarle al gobierno una mejoría con respecto a la causa, cree que van a ser escuchados sus pedidos? ¿el gobierno se va a comprometer más?
Nosotros le pedimos algunas cosas y el gobierno comenzó en el camino de dar. Hoy tienen que profundizar ese camino. Nosotros confiamos en que este gobierno va a hacer lo que corresponde. Siempre se diferenció y trató de diferenciarse de los demás gobiernos que tuvimos. Inclusive está apoyando que se investigue a los funcionarios que no cumplieron con su deber.
¿Se va a hacer justicia? ¿Los culpables tendrán sus condenas?
Si uno no tuviera esa llama de esperanza, hace mucho que hubiéramos abandonado la lucha. Cuántas veces uno se acuesta diciendo basta, no doy más, esto es imposible, tanta miseria humana, tanta basura. Pero a la mañana, uno se levanta, ve a sus hijos o la foto del que no está y renace nuevamente la fuerza que uno no sabe de dónde sale.
Vamos a luchar hasta que se sepa la verdad y, a partir de ahí, que se haga justicia. No vamos a parar hasta que nos podamos parar delante de las tumbas de nuestros muertos y decirles “descansen en paz, se hizo justicia”
|
|
|
|
|
|
|
|
