La Voz Judía


La Voz Judía
“Cuanto más los afligían, más crecían y se multiplicaban”
Por Menahem Porush


En Israel la situación es muy preocupante. Justo antes de Pesaj, por primera vez en la historia del estado, la corte secular emitió un dictamen permitiendo a los comercios expender “jametz” durante Pesaj. Es conmocionante ver que una corte judicial secular en Tierra Santa emite un dictamen que interpreta la ley de auerdo con la opinión personal del juez secular. Este es sólo un ejemplo de cómo el sistema de una corte secular deja de lado los sagrados principios del pueblo Judío.

Además de los problemas de la interferencia de las cortes seculares en cuestiones sagradas, nosotros también sufrimos por muchos decretos que el gobierno emite y que afectan principalmente a la población religiosa, tales como el recorte de los beneficios a los niños o la ayuda para las escuelas de Torá y las Ieshivot.

Yo vengo observando la situación política de Israel desde el establecimiento del estado. Incluso cuando los muy izquierdistas del Partido Mapam eran poderosos en el gobierno israelí, niguno de sus líderes tuvo el coraje de hacer lo que está haciendo actualmente el gobierno israelí liderado por Olmert, quien suma una dificultad tras otra.
Sin embargo, cada vez que nosotros, los Judíos que creemos en Hashem, estamos en una situación en la que no podemos ver “¿Me-ayin iavó ezrí?”, “¿De dónde provendrá nuestra ayuda?”, nosotros sabemos que “Ezrí me-im Hashem”, nuestra ayuda vendrá de D”s.

Y eso es lo que quisiera decir en este artículo. A pesar de todas las dificultades, y de todos los decretos que han salido en los últimos tiempos- decretos que nunca antes se habían hecho- persiste el hecho de que el Judaísmo Ortodoxo se ha vuelto mucho más fuerte que en todos los años anteriores del estado, o incluso de los tiempos del Mandato Británico. Esta es la bendición de D”s en nuestra Torá, Parasha Shemot: “Cuánto más los afligían, más crecían y se multiplicaban”.

Yo quisiera repetir algo que nos da mucho aliento. Todas las escuelas de Torá están llenas de niños. Todas las Ieshivot están llenas de estudiantes y todas las escuelas de Beit Iaacov para niñas están llenas también. En Jerusalem, en muchos años, sólo había un Seminario de Maestras para niñas. Actualmente hay muchos seminarios, probablemente uno en cada barrio. Y todos están llenos.
Lo que nos da el mayor aliento es el hecho de que todas las Ieshivot están llenas, gracias a D”s. Ni en nuestros sueños más bellos pudimos imaginar que la Mirrer Ieshivá de Jerusalem llegara a tener más de 5.000 estudiantes en una sola Ieshivá. Incluso la cantidad está más cerca de 6.000 que de 5.000.
El Fondo Cultural Deguel Ierushalaim, que es conocido por sus exitosas actividades culturales entre nuestros jóvenes, está programando un debate con la participación de 32.000 niños.

De acuerdo al sistema de gobierno, en todos los lugares en que se construye un barrio debería haber una escuela pública para niños y para niñas.
Podemos ver los cambios que se producen en barrios que anteriormente eran identificados como seculares. Ahora, gracias a D”s, uno tras otro se han vuelto jaredís. Muchas escuelas seculares han cerrado sus puertas por la falta de inscripción de alumnos. Los edificios se han destinado a escuelas religiosas que no tienen suficientes edificios, y muchos niños religiosos aprenden en lugares abarrotados de alumnos. Cuando estos edificios se destinan a escuelas religiosas, en el término de 48hs. se llenan por completo. Nos produce mucha felicidad ver cómo crecen las Ieshivot, los Talmudei Torá, y las escuelas Beit Iaacov. En poco tiempo se llenan. Y las sinagogas también están llenas de gente.

Como se sabe, grandes edificios escolares que llevaban el nombre de líderes seculares, actualmente son utilizados por niños religiosos. Por ejemplo, hay un hermoso y enorme edificio que lleva el nombre de uno de los fundadores del Movimiento Laborista –secular-, Berl Katzenelenson. Hasta hace poco tiempo, el edificio era empleado como escuela secular, pero gracias a D”s en la actualidad es una verdadera escuela religiosa conocida como “Iakirei Ierushalaim”.
Yo recuerdo un incidente ocurrido hace muchos años, en los tiempos del gran Brisker Rav, Harav Yehoshúa Leiv Diskin, zt”l. El envió al Hagaon Harav Iosef Jaim Sonnenfeld, zt”l y al Hagaon Harav Akiva Iosef Schlesinger, zt”l a la gran Sinagoga de la Ciudad Vieja, conocida como “Jurvat Rabi Iehuda Ha-Jasid” -que era el centro de la Comunidad Ashkenazi- para anunciar el jerem (excomunión) de la Escuela Lemel de Jerusalem.

También recuerdo que siendo niño, cuando caminaba con mi abuelo Reb Naftoli Zvi Porush, zt”l, él solía cruzarse de vereda a medida que nos íbamos aproximando a la Escuela Lemel para pasar lo más lejos posible del edificio, a causa del jerem del Brisker Rav, zt”l. Actualmente, ese edificio –que por muchos años fue un símbolo de los establecimientos anti-religiosos que no contemplaban las instrucciones de los Grandes Sabios – aloja al Talmud Torá Ruzhiner para niños jasídicos. Este edificio está ahora lleno de niños religiosos que dicen Shmá Israel, en contraste con los niños que estudiaban allí hace muchos años.

La situación actual consiste en que, por un lado, las autoridades del gobierno israelí ponen muchas dificultades con recortes a los beneficios a los niños que afectan enormemente a las familias religiosas numerosas. Sin embargo, sus decretos no van acompañados de lo que los líderes anti-religiosos querrían respecto a las familias religiosas numerosas. El Judaísmo Ortodoxo, gracias a D”s, está aumentando; las Ieshivot están creciendo; las escuelas de Torá están creciendo.

Como dice en nuestra sagrada Torá, Parasha Shmot: “Cuanto más los afligían, más crecían y se multiplicaban”.

Concluiré con algo que he escrito en otras ocasiones pero que siento que es apropiado en este momento. Cada vez que atravesábamos situaciones difíciles, Reb Iaacov Rosenheim zt”l, uno de los fundadores y Presidente de Agudat Israel, solía decir “Estamos llenos de esperanza. El pasado del pueblo Judío fue como nosotros quisimos que fuera y el futuro también será como queremos que sea. Nosotros sólo debemos tratar de unir el presente con el pasado manteniendo los deseos de D”s en el presente”.


 

La Voz Judía nro. 430

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