Según el Informe emitido por los Servicios de Inteligencia Israelíes, el 2004 registró una baja significativa en el número de muertos en actos terroristas y una suba en la participación de mujeres y niños. En el 2003 murieron 74 personas en comparación al 2004, en el cual esa cifra disminuyó a 14. Se produjo también un cambio en las zonas elegidas para la realización de atentados. Los Servicios de Inteligencia Israelíes atribuyen esta tendencia decreciente a la finalización en la construcción de la cerca de seguridad. Del informe se desprende que los grupos terroristas lograron identificar los puntos más débiles de la cerca en las zonas de Hebrón y Belén - creados por las demoras en la construcción - y por este motivo "trasladaron" los atentados al sur de la cerca. Según estos datos, los terroristas que realizaron los dos atentados suicidas, en el Mercado de Carmel y en Guivat Hatzarfatit en Jerusalén, atravesaron la zona de Belén y Hebrón. En el 2003 se produjeron en Israel 12 atentados suicidas provenientes de Samaria, con un saldo de 74 israelíes muertos. En el 2004 los atentados provenientes de esta misma área se redujeron a 2, causando 14 muertos. Otro cambio significativo fue el hecho de que la cerca que separa la zona "de seguridad" en Samaria resultó más efectiva, y ya se completó la parte entre el valle de Beit Shean y la zona de Rosh Ha´ain. En relación con los intentos de traspasar la cerca, los grupos terroristas concentraron sus esfuerzos a través de Jerusalén, en particular en la zona en la que aún no se construyó la cerca. Este año también subió un 62% la participación de árabes de Jerusalén Oriental en actos terroristas. Se registró una suba del 64% en la participación de niños en atentados, especialmente por la facilidad para confundirse con la población civil. Asimismo, la participación de mujeres palestinas en atentados creció, en especial por motivos románticos, debido a sus relaciones con terroristas que las reclutan. Paralelamente subió el suicidio de éstas, debido a la oposición de sus padres a dichos matrimonios. En el 2004 se intensificaron los esfuerzos para evitar la transferencia de fondos a los grupos terroristas por parte de Hezbollah y de cuentas de Hamas y la Jihad Islámica en Siria. De la investigación surge una tendencia alcista en la "tarifa de los atentados", ya que el pago para la ejecución de un atentado oscila entre 700 y 1200 dólares estadounidenses. Durante este año se registró un incremento en el número de cohetes Kasam y de morteros disparados en la Franja de Gaza, en cierta medida destinados a compensar las dificultades para enviar suicidas de la franja a las zonas de la línea verde. Esto se refleja en los muertos israelíes que este año se duplicaron, de 25 en el 2003 a 58 del 2004. Los servicios de inteligencia relacionan esto con un avance en la sofisticación de los atentados, como la penetración en fortificaciones, ataques a vehículos militares y a túneles entrampados.
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