La primera Ola fue durante la época de Alfonsín y de Menem. Con la llegada a estas playas del Río de la Plata de Libios, Sirios (Monzer Al-Kassar), e Iraníes (como Moshen Rabbani), todos ellos o una buena parte involucrados en el contrabando de armas, fundamentalismo y Terroris-mo. Por aquella época, o aún cierto tiempo antes, "algunos" observamos, el desembarco en este querido país de un grupo de los denominados "Palestinos", siendo algunos genuinos y otros "truchos".Que iniciaron su campaña en favor de "Palestina" y contra el Estado de Israel mediante escritos, publicación de libros, y lo que es peor, mucho peor, con la presencia de agitadores árabes-palestinos en diferentes ámbitos de lo social y de la cultura, en particular en los espacios universitarios y diversas Faculta-des del país. Y de esto el que escribe es un testigo directo.
Y con un esfuerzo de la memoria puedo evocar, la activa presencia del "Embajador Palestino" en Rosario (mi ciudad natal) y en toda la Provincia de Santa Fe. Allá por las décadas del setenta y los ochenta.
Y para concluir este primer bloque una reflexión o pensamiento que aparece como obsesivo: "primero la siembra y después la cosecha"......
Y la cosecha fue amarga:
Atentado a la Embajada de Israel (Marzo/92)
Atentado a la AMIA
(Julio/94)
La Segunda Ola impresiona no menos inquietante y peligrosa que la primera. La reciente reunión de Lula y Duhalde con Khadafy y otros líderes árabes. Y la propuesta o el proyecto de una cumbre a realizarse aquí en Sudamérica entre los países Latinoamericanos y los países árabes, para tratar temas de "interés común".Sean estos tópicos de índole económica y comercial, donde seguramente lo político no estará ausente. Con obvias implicancias en lo "cultural" (propaganda), y donde es de prever que cualquier "conclusión o declaración conjunta" siempre llevará "injertada" alguna declaración contra Israel y en favor de los Palestinos. Todo esto que he mencionado, debería despertar el "ojo", la atención, de nuestros dirigentes Comu-nitarios, es decir aquellos que nos representan. Y poder "adelantar la jugada". Seguir de cerca este nuevo movimiento. Que es tan peligroso como el primero. E intentar acercarse a las autoridades Na-cionales (del gobierno) y transmitir la inquietud de la "Comunidad" por ciertas derivaciones de dicho encuentro. Los judíos tenemos sobradas razones para estar temerosos.
Hemos presenciado como sujetos al amparo de "la inmunidad Diplomática y de la Religión" están seriamente sospechados de haber intervenido en planificar y ejecutar homicidios masivos.
Para concluir: "los fundamentalistas árabes-musulmanes (en general) no conocen ni reconocen de límites. Y ya hemos visto que declaraciones anti-Israelíes (y en ocasiones expresamente antisemitas) preceden en el tiempo a devastadoras "acciones" (atentados).Se perfectamente que todavía no ha sucedido nada nuevo. Se que soy un "futurista".Pero en virtud de los antecedentes y de sus consecuencias, sería muy conveniente en esta ocasión (y siempre), y como se deduce del saber popular: "abrir el paraguas aunque todavía no llueva".•
Dr. Natalio Daitch
nataliodsalud@hotmail.com
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