La sentencia que aplicó en el día de ayer el Jurado de Enjuiciamiento
del Consejo de la Magistratura al ex-juez federal Galeano es lo mínimo que
se podía esperar. Sin embargo, aun falta muchísimo: Galeano no es el único
a quien se debe juzgar y condenar. Una infinidad de funcionarios
políticos, policiales y judiciales también deberían estar imputados y responder la pregunta de por qué a mas de 11 años del atentado contra la AMIA, aun no se sabe nada ni hay ningún responsable preso. Pareciera como que no pasó nada.
La red de complicidades políticas y los laberintos burocráticos son
enormes.
El ICUF (Idisher Cultur Farband / Federación de Entidades Culturales
Judías de la Argentina) y CONVERGENCIA –Por un Judaísmo Humanista y
Pluralista- entienden que el aporte que nuestro país puede hacer a la lucha contra el terrorismo es desentrañar esta cuestión, yendo bien a fondo, poniendo claridad sobre la vinculaciones entre la "conexión local" y los autores del atentado.
Como lo dictaminó el propio Tribunal Oral N° 3 en su oportunidad, el
juez destituido urdió una pista falsa al servicio del poder político. Por lo
tanto es necesario intensificar inmediatamente la investigación a todos
los organismos del estado intervinientes y en especial a personajes
conspicuos del ejecutivo de entonces, que visiblemente se esmeraron que esta causa no se saliera de los carriles por ellos trazados, y a conspicuos
integrantes de los organismos de seguridad, todavía hoy sospechados de alta complicidad.
Complicidad conciente o inconsciente, notoria como lo indica el tercer
cargo presentado por el Consejo de Enjuiciamiento, a la que lamentablemente estuvieron involucrados relevantes dirigentes de la comunidad judía organizada, que obstinadamente apoyaron la gestión del hoy destituido juez a través de letrados que nunca llegaron a imponer jurídicamente alguno de los alegatos presentados como querellantes. Indudablemente es urgente una revisión exhaustiva institucional a la que se debe agregar el expreso repudio y remoción de nefastos personajes involucrados, todavía presentes en el escenario de la vida judía, si se quiere llegar a la tan ansiada unidad comunitaria. Y esto no será a través del olvido del pasado, como lo ha formulado recientemente el flamante presidente de la kehilá, sino todo lo contrario. La memoria es una cualidad judía que ha posibilitado nuestra continuidad a través de dos milenios de persecuciones y martirios.
Ing. Dardo Esterovich.
Presidente
Convergencia
Prof. Daniel Silber
Presidente
ICUF
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